Cargando...
  • Algas de Galicia, directas al paladar

    Las algas son los seres vivos más antiguos de nuestro planeta y, por tanto, un recurso natural que se renueva de manera permanente. Ello las convierte en un alimento sostenible con proteínas de alto valor biológico, minerales esenciales y oligoelementos.

    Algamar, empresa localizada en la costa pontevedresa de Pazos de Borbén, es pionera en  incorporar el alga a la cultura gastronómica española. Primera empresa que decide especializarse exclusivamente en la recolección, secado y elaboración de algas marinas para uso alimentario como verdura.

    Fundada en 1996 por los hermanos Fermín y Clemente Fernández, es un espejo donde pueden retratarse emprendimientos que permanecen enclavados en sus lugares de origen, en este caso Galicia. Esta zona, que representa el 35% del litoral español cuenta con abundante diversidad de especies marinas y con una tradición marinera muy arraigada. Curiosamente, su situación entre los paralelos 42 y 44 es semejante con la latitud de las costas del Japón, donde el consumo de algas deriva de la época prehistórica.

    La explotación de la huerta submarina del sur de Europa exige la visión de seguir creciendo y así generar empleo y riqueza. Con la irrupción del COVID19, el emprendimiento rural e innovador es la apuesta para un nuevo modelo social y económico.

     

    ¿Quién es Fermín Fernández?

    Nació en la costa de la Bahía de Vigo hace 54 años, de familia sencilla, con vínculo cotidiano y directo con el mar y el campo en la línea de la producción sostenible y ecológica. Versátil en sus actividades, autodidacta, siempre activo y entregado a lo que hace.

     

    ¿Qué habilidad es la más importante para tener éxito en los negocios?

    Tener la claridad de que la idea que uno tiene, la apuesta personal, es la adecuada en el  momento que surge. A partir de ahí, desarrollarla con tesón se convierte en un objetivo irrenunciable. Para ello es muy importante coordinar las funciones que exige, orientar recursos y hacer equipo.

     

    ¿Cuál ha sido el principal acierto en la trayectoria como emprendedor?

    Creo que ha sido el optimismo, tener fe e ilusión. También ser honesto te hace creíble frente a los demás si quieres que la actividad se mantenga en el tiempo. También se cometen errores. Una advertencia que daría a los que vienen por detrás es que nada hay seguro, ni siquiera lo que parece que no puede cambiar. No dormirse en los laureles, como se suele decir, es una actitud que no se debe olvidar.

     

    ¿Qué papel juega la creatividad y la innovación en Algamar?

    La creatividad y la innovación son las “madres del cordero” de Algamar. Una empresa surgida de la nada en el año 1996, sin nadie a quien copiar o en quien inspirarse, salvo los asiáticos que nos quedaban muy lejos y a quienes por cierto no fuimos a visitar. Así que partimos absolutamente de cero, de nuestras algas como recurso valioso reconocido oficialmente por la Xunta de Galicia, pero nada más. Y decidimos en esa época abrir el camino como primera empresa especializada en recolección y secado de algas silvestres de Galicia. Un camino duro y apasionante a la vez. Con el tiempo nos vendrían reconocimientos como “Premio Biodiversidad Emprendedores e Innovación”, del Ministerio de Medio Ambiente en el año 2009 y “Protagonistas de la Economía Verde” en el 2014.

    Todos los sistemas de recolección, selección, secado, procesado, fuentes de energía renovable, investigación, divulgación, se fueron desarrollando de forma autodidacta hasta llegar a lo que es ahora. Veinticuatro años después contamos con capacidad de secado simultáneo de 10 tn. de algas frescas en 36 horas en sus secaderos a baja temperatura; maquinaria para fabricación de muy variados productos; instalaciones de energía renovable fotovoltaica y de biomasa.

    También contamos con una red de distribuidores en España y buena parte de Europa, colaboración con las Universidades y con el CSIC. Desarrollar estudios nutricionales con y responder a sus propuestas ha sido un camino interesantísimo con resultados inéditos y altamente valiosos. La divulgación ha sido una de las piezas claves en nuestra trayectoria: jornadas, conferencias, talleres de cocina, cursos y publicación de libros: “Algas de Galicia Alimento y Salud” – traducido a 6 idiomas – y “Recetas con Algas Atlánticas”.

     

    Muchas zonas de Galicia forman parte de lo que se denomina la España vaciada, ¿qué papel puede jugar el emprendimiento en la activación del ámbito rural?

    Algamar tiene sus fábricas justamente en zonas tradicionales de emigración (Pazos de Borbén, y A Lama) donde la gente se ha visto forzada a buscar trabajo lejos de su lugar de origen y por tanto a dejar de ser miembros activos de la economía y de la cultura local. Mediante iniciativas como la nuestra, se puede ayudar a preservar esta riqueza local y a reforzar la estructura social y cultural.

     

    ¿Qué consejo darías a los jóvenes que están pensando en desarrollar un proyecto emprendedor?

    Que piensen primero si les gusta y les motiva. Y, tan importante como eso, si ese proyecto es adecuado para la sociedad, si la sociedad “lo necesita”. Con esos dos ingredientes, junto a una buena organización y una gran dosis de constancia, el éxito está asegurado.

     

    ¿Qué futuro tiene el mercado de algas?

    Un gran recorrido. Queda mucho por hacer hasta que nuestra sociedad en su mayoría llegue a valorar y consumir el alga marina. Se ha hecho un trabajo educativo de dar a conocer su gran valor, pero se requiere hacerlo a gran escala. España tiene un consumo significativamente mayor que otros países europeos porque ha habido un trabajo detrás. Algunos medios de comunicación se han volcado en las algas como tema de interés.

     

    ¿Qué propiedades culinarias tiene el alga marina?

    Las algas son ya un ingrediente indispensable en la carta de cualquier cocinero que se precie. Se pueden hacer verdaderas maravillas, con unas presentaciones, sabores, olores, y texturas increíbles. Hay muchos ejemplos en la cocina española, ya desde los viejos tiempos de Arguiñano y Arzak, pasando por Ferrán Adriá y otros muchos cocineros más modernos, que valoran las algas como uno de sus recursos más preciados. Pero no hace falta ser un famoso cocinero para preparar y consumir algas. Ni copiar a la cocina exótica asiática. En Algamar siempre hemos apostado por la cocina sencilla, casera, basándonos en los platos de nuestra rica tradición. Algo tan popular como la tortilla de patatas, queda buenísima con algas. Una paella o una empanada. Un cocido o una sopa. Incluso un postre con algas. Cualquier plato admite algas, teniendo en cuenta que es una verdura concentrada, y que las cantidades han de ser pequeñas, como acompañante, y no como ingrediente principal. Al menos para empezar. De hecho es así como se consumen en los países con larga tradición.

     

    ¿Cómo estáis afrontando la crisis del COVID19? ¿Cómo es el mundo que viene?

    El mundo que viene no lo sabe nadie, creo yo. Las ferias de divulgación, por ejemplo, en Europa, se van posponiendo. Ya veremos. En nuestro caso, a día de hoy, estamos manteniéndonos bien e incluso creciendo respecto al año pasado. Hay que tener en cuenta que Algamar es una empresa de alimentación, considerado “un servicio esencial”. Y una alimentación con unas propiedades especiales para reforzar la salud. Y eso, afortunadamente, el consumidor lo percibe.

     

     

  • También te puede interesar...

    No hay comentarios

    Dejar una respuesta